El pasado, 12 de junio, fue el día mundial contra el trabajo infantil, una dinámica presente en la ciudad de Melilla. A continuación analizamos, publicaciones, noticias y hechos cotidianos en la ciudad que generan situaciones de trabajo y explotación infantil.
En enero de este año, CIDOB (Centro de Relaciones Internacionales de Barcelona) publicó un análisis comparando la gestión de la migración en distintas regiones españolas, entre ellas se analiza la Ciudad Autónoma de Melilla. Se confirma algo latente para nuestras voluntarias en terreno, y es que la ciudad no tiene un modelo de integración, no dispone de unos objetivos ni estructura de coordinación y que no existen acciones específicas pensadas para reducir la desigualdad entre las personas migradas y las nacionales.
Además, el marco normativo dificulta el acceso a los derechos más básicos de la infancia, con barreras administrativas como el bloqueo al acceso al padrón, o la larga espera para poder acceder a los servicios sociales. Esto origina que menores en tránsito y menores que aún habiendo nacido en Melilla no tienen su situación regularizada, se encuentren en un limbo administrativo. Sin poder acceder a derechos básicos como la educación y por ende encontrarse muchas veces sometidos/as a la necesidad de trabajar a edades tempranas.
Muchos de los menores no escolarizados se encuentran tutelados por la Ciudad Autónoma de Melilla en los distintos centros de acogida de la ciudad, entre ellos La Purísima.
La Purísima es un centro de acogida de menores situado a las afueras de Melilla, a 200 metros de la valla fronteriza. El edificio es un fuerte militar que en 2001 pasa a ser el centro de menores que es hoy en día.
La falta de condiciones dignas, la no escolarización e integración y el trato recibido, da como resultado que los menores tutelados tomen la decisión de salir a la calle a “buscarse la vida”, incluso antes de cumplir la edad legal para poder trabajar (según el artículo 6 de los estatutos de los trabajadores, en la que “Se prohíbe la admisión al trabajo a los menores de dieciséis años.”), sin otra opción que la de un trabajo no reglado y precario, donde ni las condiciones ni el sueldo son dignos. Muchos optan por salir del recurso de acogida de forma definitiva y vivir en la calle, donde quedan invisibles ante los ojos de las administraciones y asociaciones gubernamentales.
“El centro no bueno. Yo me busco la vida, la calle”
Testimonio de menor en situación de calle 2 de junio de 2022, Melilla.
Hay niños que consiguen trabajos algo constantes, como acompañar a un mercader, vender sus productos, preparar y recoger los puestos en los mercados de la ciudad. Mientras que otros deben resignarse a limpiar o aparcar coches, llevar la compra a las casas, etc., a cambio de unos pocos euros que a veces nunca llegan a recibir.
La semana pasada distintos medios informativos publicaban una noticia con el siguiente titular, “La Guardia Civil desarticula en Melilla una organización que utilizaba a menores tutelados en el centro de La Purísima para el tráfico de droga”.
Esta noticia es una muestra más de las deficiencias del sistema de acogida de menores no acompañados español.
Desde Solidary Wheels reivindicamos la protección e integración de los menores, la garantización de sus derechos y el acompañamiento en el tránsito a la vida adulta. Eliminando políticas y acciones que promueven la criminalización de estos niños y niñas. A través de normas concretas en las que prime la condición de menor y no la de migrante irregular.
Denunciamos el abandono institucional y la incapacidad de las políticas sociales actuales en dar respuesta a las necesidades de los niños y niñas. Estas prácticas ponen en peligro la integridad física y moral de los y las menores que se ven sometidos a este tipo de trabajo. Normalmente a través de la coacción y manipulación (aprovechándose de la desinformación del menor o la ingenuidad) haciéndoles partícipes de trabajos ilegales y poco seguros. Es una clara muestra de cómo el sistema capitalista permite la rentabilización de la pobreza y se sirve para ello de personas en situaciones vulnerables.
Una vez más, reclamamos el derecho a ser niño y niña, para todos ellos y ellas en cualquier lugar del mundo!
Comments